PASAPORTE A NUEVA YORK, GRACIAS. CHAPTER 1

Que mejor forma de terminar el fin de semana que disfrutando del primer capitulo de Nueva York, en él, os contaremos por qué elegimos ese destino como luna de miel, y no otro más relajante, nuestra experiencia en el aeropuerto de Estados Unidos, controles, documentación, tiempo de espera aproximado y como puedes ir desde el aeropuerto hasta Manhattan, si es allí donde os alojaréis. ¡Vamos allá!

La elección del viaje, fue de lo más fácil, ambos teníamos muy claro que si algún día nos casábamos, nuestros pasaportes tendrían destino a Nueva York. Siempre hemos soñado con poder caminar por las calles de Manhattan, disfrutar de sus perritos en plena calle, o observar el Skyline desde el ferry al atardecer. En definitiva, andar, mochila al hombro, hasta no poder más. Y así fue, el Martes 19 de Julio, pusimos rumbo a la ciudad que nunca duerme.

Nuestro avión salió desde el aeropuerto de Málaga con destino directo al John F. Kennedy (JFK). Volábamos con la compañía Air France, aunque el vuelo fue operado por Delta. Un detalle que nos encantó, fue que como nuestro vuelo iba con retraso, pusieron en la puerta de embarque bolsitas de patatas, caramelos, botellas de agua y libros infantiles para pintar ¡QUÉ DETALLE!

La duración del vuelo fue aproximadamente de unas 8 horas y 17 minutos. Un vuelo largo, pero cómodo. Una de las anécdotas con las que comenzamos el viaje, fue que, a pesar de que nuestros asientos eran consecutivos al comprarlos, en la Boarding Pass, o tarjeta de embarque teníamos un señor entre los dos, ¡SÍ, EN NUESTRA LUNA DE MIEL! Separados nada más comenzar, afortunadamente, y gracias a mi estupendo inglés fluído, conseguí que nos cambiaran el asiento.

El vuelo transcurrió con normalidad, nos dieron un picoteo justo después de despegar, después nos ofrecieron un almuerzo, que para ser de avión, era aceptable, y además nos dieron una merienda. Ya nos estaban cebando antes de aterrizar…

En el transcurso del vuelo, nos dieron un papel que tienes que rellenar allí mismo en el avión y que tendrás que entregar al pasar por aduanas. Es un documento que no tiene nada que ver con el E.S.T.A, del que os hablaré en el siguiente capítulo, ya que el tema de los documentos puede resultar engorroso, para los que visitan por primera vez Nueva York.

Al salir del avión, hay que pasar por control de seguridad, allí es importante que te coloque en la fila de VIAJEROS INTERNACIONALES. Todo esto puede durar si tienes suerte, alrededor de una hora, aquí entregas la documentación y te hacen poner las huellas dactilares, además de hacerte una estupenda fotografía, así con tu cara de 8 hora de vuelo.

Una vez pasas el control de seguridad, recoges las maletas. Aquí, tuvimos un momento de caos, ya que pasa salir, había otra cola interminable de pasajeros, además, nuestras maletas ya no estaban en la cinta, estaba colocadas todas fuera en un rinconcito y un hombre muy amable las custodiaba. Pues nada, otra cola, con la de planes que tenía yo hoy para hacer en la gran manzana…

Pasando aduanas, conseguimos salir del caos del aeropuerto…¿o no?

Para llegar a Manhattan lo puedes hacer de varias maneras:

Taxi, desde nuestra humilde opinión, no es el más recomendable, ya que el precio ronda los 50$ más pejaes, suplementos y propinas, así que se puede subir bastante.
Air train y metro, es la más barata sin duda, pero no la más cómoda por el hecho de ir con las maletas.
Tranfer, ésta es la que nosotros elegimos, es cómoda, rápida y barata. Al salir, justo enfrente tenéis un stand donde chequean nuestro VOUCHER , o papelito de reserva como le digo yo,en nuestro caso,tuvimos que esperar como 45 minutos a que llegara nuestro conductor. La compañía con la que hicimos la reserva del traslado es GO AIRLINK, ya os hablaremos de ella en otro capítulo más detalladamente, hay anécdotas que contaros.

Entrar en la gran manzana fue como adentrarse en una de tus películas favoritas, os dejamos alguna foto, y he deciros, que fue inevitable emocionarse al cruzar por uno de sus puentes para entrar en Manhattan.

Después de todo éste ajetreo, por fin llegamos a nuestro Hotel, YOTEL, situado a 5 minutos a pie de Time Square. Dejamos las maletas y salimos a dar un paseo por los alrededores, para reconocer el terreno e intentar adaptar nuestro cuerpo al nuevo horario.